Gracias a la llegada de Rubiales la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles) ha empezado a actuar como lo que es, el sindicato de los futbolistas. Esto antes era difícil porque su anterior ¿lider?, Gerardo González Movilla, formaba parte de la directiva de la Federación (esto es como si el secretario de la UGT también estuviera en la CEOE...).
Antes de llegar a la presidencia ya alertó de la situación precaria de muchos futbolistas y que si hacía falta acudir a la huelga, irían. Pues bien, ha hecho falta y está convocada para la jornada de los días 17 y 18 de abril (en primera y segunda será la 33). El parón se dará en todas las categorías hasta Tercera División y el apoyo se espera total, esperemos no haya ningún topo.
Según dice la dirección de AFE, la deuda asciende a más de cuatro millones de euros sólo en segunda b. Además muchos clubes se encuentran en situaciones que rozan lo surrealista. Por ejemplo el Mallorca está realizando una de sus mejores campañas en los últimos años, posiciones europeas e incluso de champions, sin embargo sus jugadores no tienen garantizado el cobro y tampoco la posibilidad de jugar UEFA o Champions aunque se clasifiquen porque tienen opciones de entrar en Ley Concursal (la UEFA prohibe disputar competiciones europeas en esas condiciones).
Uno de los casos más conocidos estos años ha sido el Levante, curiosamente el capitán era Rubiales (hoy presidente de la AFE), aunque a costa de los jugadores, el club se quitó de encima al lastre Villarroel y puede subir a Primera con Luis García Plaza como entrenador y Quico Catalán como presidente honrado (o por lo menos lo parece).
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